Me llamo Hamilton y hace unos años conseguí entrar, gracias a una beca, en el misterioso colegio West Naightburg, donde nadie sabía que hacían para asegurar un gran éxito profesional a los alumnos, cambiando su comportamiento.
Un tiempo después de mi entrada al colegio, sin notar nada extraño, nos aprisionaron y nos confesaron que nuestro cerebro iba a ser alterado para hacernos más mecánicos y perfectos, prescindiendo de cualquier emoción a la hora de actuar.
Conseguí escapar confesando mis trampas en las pruebas de admisión, bajo una amenaza de muerte si contaba algo de lo que allí había vivido.
Un tiempo después de mi entrada al colegio, sin notar nada extraño, nos aprisionaron y nos confesaron que nuestro cerebro iba a ser alterado para hacernos más mecánicos y perfectos, prescindiendo de cualquier emoción a la hora de actuar.
Conseguí escapar confesando mis trampas en las pruebas de admisión, bajo una amenaza de muerte si contaba algo de lo que allí había vivido.
4 comentarios:
Ya le he dado a natalia las instrucciones, si no podéis entrar me lo decías otra vez.
oye juli esta mui bien pero HIBA ESTA CON H JAJAJAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAA CREPUSCULAAAA
Creo que el microrrelato ha perdido partes importantes respecto al texto largo que ayudan a su comprensión. Has dejado partes que podrían haber desaparecido y otras que son necesarias. Creo que podrías mejorarlo. Inténtalo tú sola ahora o cuando acabes los exámenes o en un recreo lo trabajamos
Pd: Miriam tiene razón, hay alguna más
HOla Julia, el microrrelato está mejor así, pero prueba a dejarlo con final abierto, que se intuya lo que va a pasar pero sin contarlo, a ver como te queda.
De todas formas Julia, tu principal problema no es la expresión sino las faltas de ortografía.
Feliz año.
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